About poder de la palabra
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La palabra de Dios tiene el poder de cambiar vidas, sanar heridas y guiar a las personas por el camino correcto.
La Biblia es una fuente inagotable de sabiduría y alimento espiritual que podemos utilizar para impactar nuestras vidas y las vidas de los demás.
La importancia de agradecer a Dios por escuchar nuestras súplicas: Un recordatorio de fe y gratitud
Responsabilidad y cuidado de la creación: Si todas las cosas han sido creadas por la Palabra de Dios, entonces tenemos la responsabilidad de cuidar y preservar la creación como mayordomos de lo que Dios nos ha confiado.
“El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu son vida”
“Por lo cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual more info actúa en vosotros los creyentes”
Las palabras que escribes o hablas a otros pueden dejar un gran impacto y crear un recuerdo duradero, ya sea bueno o malo, por lo que es muy importante elegirlas sabiamente.
Así se les reconoce la capacidad de estar hablando durante un periodo significant de tiempo sin que se pueda extraer de sus palabras una conclusión clara.
Al ponerse en el lugar de los demás y considerar sus sentimientos, podemos elegir palabras que sean edificantes y alentadoras.
Cuando usamos nuestras palabras para criticar, juzgar o difamar a los demás, estamos causando un daño profundo en sus vidas. Santiago 3:six nos advierte que «la lengua es un fuego, un mundo de maldad». Nuestras palabras pueden encender conflictos y destruir relaciones.
Nuestras palabras tienen el poder de llevar la luz de Cristo a las tinieblas y de llevar esperanza a los corazones desesperanzados.
Finalmente, la Biblia nos anima a utilizar nuestras palabras para edificar y alentar a los demás. Efesios four:29 nos exhorta: «Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes».
retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen.
Cada aspecto de la creación es un testimonio tangible de la capacidad transformadora de la Palabra de Dios.